Muchas veces cuando estamos montando un pequeño servidor con Raspberry Pi necesitaremos tener una IP estática.
Además esta guía es valida para cualquier Raspberry pi tanto el modelo 1 como el 2, 3, 4 y 5 siempre que se este ejecutando un sistema linux, que es lo más habitual. Pero primero...
¿Que es la IP estática?
La IP es la dirección donde se recibirán los datos de la red, algo parecido a la dirección de casa. No entraremos mucho en detalles pero lo importante es saber que las principales son la IP publica y ,la que nos interesa, IP privada.
Esta IP privada es la que tenemos en nuestra red de casa. Podríamos decir que el punto medio entre estas dos redes es el router, que es el que se encarga de direccionar los paquetes desde la IP Publica a nuestro ordenador. De esta manera si estas en estas viendo este blog, solo se muestra en tu pc/movil y no en todos los equipos que tengas en casa.
¿Por qué necesitas una IP Estática en tu Raspberry pi?
Tener una dirección estática nos ofrece ventajas como que tu dispositivo sea fácil de encontrar en la red, tener un acceso remoto consistente, muy útil para SSH, domotica o VPN, mayor seguridad, con firewalls más precisos y la configuración de dispositivos de red, como DHCP, que es el caso que nos ocupa.
Primero tenemos que abrir una terminal en tu Raspberry Pi aunque si vas a montar un servidor, seguramente puedas conectarte con la Raspberry Pi a través de SSH.